7.10.24

 Aquí está la versión del sutra que leemos en las sesiones antes de la meditación en sí:



Sutta Karaniya Mettá (amor incondicional)

 

Que todos los seres sintientes seamos capaces e íntegros, rectos, amables al hablar y sin orgullo. Que estemos contentos, fáciles de satisfacer, libres de cargas y con los seis sentidos en calma. Que seamos sabios, virtuosos, no arrogantes y sin ningún deseo por los bienes y riquezas de los otros.

Que seamos incapaces de hacer nada malo que los sabios podrían reprobar. Que todos los seres estén, bien, felices y en paz. Que vivamos con seguridad y en pleno regocijo. Que todos los seres vivos seamos felices, tanto los débiles como fuertes, altos y robustos, de talla media o pequeña, presentes o no presentes, próximos o distantes, nacidos o por nacer. Que nadie engañe o maltrate a otro o desprecie a un ser vivo por cualquier razón o causa.

No permitamos que la ira, el odio y la codicia nos haga desear el mal a otro ser vivo, sea quien sea.

Así como una madre vela por su hijo único, dispuesta a perder su propia vida para protegerlo, con ese corazón de amor puro se debe cuidar a todos los seres vivos, inundando el mundo entero con una bondad y compasión que venzan todos los obstáculos para la paz y la felicidad. Por tanto, ya sea de pie o andando, sentados o echados, despiertos o dormidos, durante nuestras horas de estudio, trabajo o recreo, debemos recordar conscientemente que la mejor forma de vivir en el mundo es cultivando en nuestros corazones el Amor hacia todos los demás, sin discriminación alguna y con plena ecuanimidad.

Así, sin ataduras producidas por el engaño del apego, la aversión y la ignorancia, y con una clara visión sustentada en la sabiduría y la compasión, no entraremos más en el ciclo de los sufrimientos.

El sutra Karaniya Metta (amor benevolente)

A continuación copio otra versión del sutra que a veces leemos como preámbulo de la práctica de cultivo del amor benevolente ( metta bhavana...